sábado, 21 de junio de 2014

Ferrata de Camaleño | FOTO Y VIDEO


Para el segundo día de nuestra escapada a Picos de Europa, habíamos planeado una actividad más montañera: la ferrata de Camaleño - Los Llanos.


ACCESOS Y PREVIO:
Como decíamos en la entrada anterior [ENLACE], estábamos alojados en Meré.

Lo primero será llegar a Potes siguiendo la N-621 y cruzando, si venimos del Norte, el estético Desfiladero de la Hermida. Cruzaremos el pueblo de lado a lado por la CA-185 y siguiendo por ésta, llegaremos en 15 minutos a nuestro destino. La ferrata se encuentra en Los Llanos, a 5 minutos pasado Camaleño.

Antes de empezar con la actividad, redesayunamos en el pueblo de Camaleño, en el Hostal El Caserío, que está a pie de carretera. Productos de la zona hechos a mano y gente maja. El chico que nos atendió ni se molestó cunado uno de nosotros le tiró un café recién hecho por encima... sin querer claro.


DESCRIPCIÓN DE LA FERRATA:
Desde el parking de la carretera de Los Llanos al inicio de la ferrata hay cinco minutos y no tiene pérdida, ya que estás constantemente viendo la pared. El acceso empinado (llevar cuidado) comienza junto a un poste indicador con algunas de las rutas de la zona.
El recorrido se parte en dos zonas. El primer paño es muy vertical y con un par de pasos físicos. Eva iba la primera y le pareció duro y decidió que no seguiría para arriba porque no lo veía claro. Desde el final de este primer bordillo hay que caminar un poco para llegar al siguiente y ella aprovechó a bajar por ahí.
Al final solo los chicos continuamos hacia lo siguiente. Un pequeño tramo más asequible con sitios de andar hasta llegar a otro muro prácticamente vertical. Se sube con tendencia a la derecha para llegar al punto en el que se encuentra el escape. 
Aquí podemos decidir si seguir hacia arriba, por terreno parecido al que estamos llevando o, mucho mejor, girar hacia la izquierda de la pared en busca del tibetano... que al fin y al cabo es por lo que hemos venido. Son unos 20 metros aprovechando una esquina que hace la roca y que nos deja caminando a 50 metros del suelo y con inmejorables vistas de Los Llanos. ¡Cómo se menea en la zona central!
Pasado el puente, continúa la tónica vertical, añadiendo un par de desplomes sencillo pero de apretar. La salida por arriba nos deja en la cima de Cotera de la Cruz disfrutando de las vistas del macizo oriental de los Picos de Europa.

La bajada es empinada y resbaladiza siguiendo un marcado sendero. No quitarse el material aún, pues habrá que cruzar la ferrata por un punto y se hace asegurado a un cable de vida.

¡OJO! Nada más dejar el cable de vida, seguir hacia abajo por traza poco marcada y NO por el sendero que sigue de frente.

Nosotros, durante el regreso, nos acercamos a refrescar los pies en un pequeño riachuelo que forma una estética cascada. Y, después, al bar de Los Llanos a refrescarnos por dentro.

DATOS DE LA FERRATA:
  • Vía: de Camaleño
  • Longitud: 1 km en total | 190 m equipados
  • Desnivel: 160m
  • Tiempo empleado: 1:00 h ferrata (con paradas) | Aproximación: 5' | Regreso: 20'
  • Cimas: Cotera de la Cruz
  • Material: kit de ferrata, casco. Llevamos cuerda doble de 60 m por si alguien necesitaba ayuda (vale con 30 m) y asegurador.
  • Dificultad: K-3 escala austriaca. Pared principalmente vertical. Tramos de grapas y cadenas. Puente tibetano.
  • Info: web de la ferrata.


VÍDEO DE LA FERRATA:





FOTOS DE LA FERRATA:

Empinada pero corta aproximación a la primera pared.

Eva prueba yendo delante en este primer tramo vertical, aunque luego se le atragantaría.

Yo, que voy siguiéndola, veo así al resto mirando hacia abajo. La cosa esta empinada.

Iniciamos la segunda parte de la ferrata, de momento más tumbada. Se ve el camino por el que Eva vuelve a la base de la vía.

Alguna barriga que nos vamos encontrando.

Tramo tumbado en el que poder echar un vistazo a Los Llanos desde el aire.

Pachi se pone delante y empieza con el muro vertical que nos lleva hacia el tibetano.

Carlos y Guiller me siguen.

Se aprecia la verticalidad de este paño de roca.

Pronto llegamos al punto del escape, que sigue la línea amarilla por fuera del techo que se ve.

Así de interesante está el acceso al puente tibetano. Aprovecho para echar un vistazo a la furgo, abajo en el parking :)

Pachi pasando el tibetano. No es difícil, solo hay que hacer movimientos lentos para no balancearse demasiado. El miedo ya es cuestión de cada cual...

Salida con ambiente.

Carlos terminando de cruzarlo. Se aprecia la seguridad del montaje.

Aquí viene Guiller, con un buen montón de aire debajo de los pies.

Y volvemos a subir por roca vertical, encontrando pequeñas panzas como esta.

Guiller, que cierra el grupo, terminando la ferrata de Camaleño.

Foto de cima, Cotera de la Cruz, final de la ferrata de Camaleño.

Macizo oriental de los Picos de Europa.

De regreso, siguiendo el estrecho y empinado sendero.

Y ¿si metemos ahí los "pieces"?

En el camino de vuelta hay que pasar un tramo asegurado, que cruza por medio de la ferrata.



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domingo, 8 de junio de 2014

Covadonga y cueva de Orandi | FOTO


Hace ya un mes, aprovechando el puente de Semana Santa, nos marchamos de casa rural a Asturias con la intención de conocerlo un poco más y hacer algo interesante por la zona de Cabrales. El primer día empezamos con la visita al Santuario de Covadonga y con un poco de senderismo hasta la cueva de Orandi.


ACCESOS Y PREVIO:
Alquilamos casa en Meré, o más concretamente en El Cueto, un pequeño pueblecito con poco más de cuatro casas en el centro de la comarca de Cabrales que era la localización que buscábamos. Nos hospedamos en la casa Campera de Turismo Rural Anita [ENLACE].

Ya sea desde Cangas de Onís o desde Panes, el acceso a Covadonga se hace por la AS-114. En las inmediaciones de Soto de Cangas tomamos la rotonda hacia la AS-262, que sera la vía que nos llevé a Covadonga.

En verano o en fechas festivas es más que probable que el acceso en autobús sea obligatorio.

Como el día se presentaba con una niebla que amenazaba con no dejarnos ver los lagos nos conformamos con visitar el santuario, en el que Eva y yo ya habíamos estado en 2009 [ENLACE]. Así pues, nos mezclamos con los turistas en el recorrido por la cueva, la ermita y la basílica y nos hicimos algunas fotos.


Las hermanas posando delante de la caída de agua proveniente de la cueva de Covadonga.

Ermita de la Cueva de Covadonga y el chorro de agua que sale de la oquedad.

Visitando la ermita.

Basílica de Covadonga rodeado por la niebla.

Interior de la basílica.




SENDERISMO HASTA LA CUEVA DE ORANDI:
Para hacer algo más y aprovechar que estábamos allí, decidimos seguir el PR-PNPE-6 que nos lleva desde la cueva de Covadonga hasta la cueva de Orandi. Se unen así las dos bocas de una oquedad que puede recorrerse por su interior.
El recorrido comienza frente a la cueva de Covadonga, donde existe un cartel que señala y detalla la ruta. Al poco de comenzar, nos internamos en el húmedo bosque y empezamos a subir sin tregua. Una ascensión por senderos muy bonitos y empinados que nos hizo sudar a base de bien.
La cota máxima se alcanza tras cerca de hora y media, llevándonos en ligera bajada hasta el punto de retorno, la cueva de Orandi. Aprovechamos para ver un poco el inicio de la cueva, refrescarnos con el pequeño caudal que entra y comer algo a la sombra.
El retorno se hace por el mismo camino... ojo con las piedras y la humedad. Tocar el suelo con las posaderas no es difícil.


DATOS DE LA RUTA:
  • Distancia: ~4,5 km
  • Desnivel: 450 m
  • Tiempo empleado: 3:00h total | 2:20h en movimiento
  • Cimas: ninguna
  • Material: nada especial.
  • Dificultad: baja; físicamente pesada la ascensión, sobre todo con mucha humedad. 


FOTOS DE LA RUTA:

Primeras rampas a través del bosque.

A las Elizaga nos les gusta la mezcla subir + humedad.

El sendero va haciendo continuas zetas para suavizar la pendiente.

El día empieza a abrirse y sobra la ropa.

Uno de los carteles indicadores del PR-PNPE-6, en algún punto en que el sendero se difumina.

Bajando hacia la Vega de Orandi.

Las chicas vienen andando tranquilamente.

Boca de la cueva de Orandi.

Entramos a cotillear un poco el inicio de la misma.

Uno de los moradores de la cueva.

Regreso a Covadonga por el mismo camino.



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